Hoy todo el Capítulo General tenía una cita con el papa Francisco. La audiencia estaba fijada para las 11 de la mañana. Los frailes, a pie o usando medios públicos, fueron llegando poco a poco al Vaticano. Debíamos estar ante la Puerta de Bronce a las 10:15 para ser conducidos a la Sala Clementina. Allí nos recibió puntualmente el Santo Padre, al que nuestro Padre General, Miguel Márquez, ha dirigido unas palabras en su nombre y en el de toda la Orden: frailes, monjas y seglares. “Santo Padre -ha dicho- quiero con mis hermanos y hermanas arriesgar la vida, no esperar a mañana, sin miedo a ser heridos, como caballeros sin sueldo, decía Teresa, (Vida 15, 11), ayudando a Jesús a llevar la cruz, ayudando al Papa a llevar la cruz, desde nuestra obediencia y servicio, sin echarnos atrás, deseosos de conocer y amar cada vez más a Jesús para hacerlo conocer y amar, con palabras de Teresa de Lisieux”.

NB: El texto completo del mensaje -en español- podéis encontrarlo en nuestra página Facebook:

www.facebook.com/CuriaGeneraliziaCS

Las palabras del Santo Padre han resonado en plena sintonía con las de nuestro Padre General: “la fidelidad exige un compromiso firme con los valores del Evangelio y del propio carisma, y la renuncia a lo que impide dar lo mejor de uno mismo al Señor y a los demás […]. La amistad con el Señor es, para Santa Teresa, vivir en comunión con él; no es sólo rezar, sino hacer de la vida una oración; es caminar -como dice su Regla- “in obsequio Iesu Christi”, y hacerlo con alegría […]. a amistad con Dios madura en el silencio, en el recogimiento, en la escucha de la Palabra de Dios; es un fuego que hay que alimentar y custodiar día a día”.

En este enlace podréis encontrar el texto completo:

https://press.vatican.va/content/salastampa/es/bollettino/pubblico/2021/09/11/carme.html

Después de escuchar las palabras confortantes del papa Francisco, los capitulares volvieron a casa.

Por la tarde el Capítulo general afrontó una tarea muy necesaria: el P. Vincenzo Mancusi, ofm, invitado al Capítulo, instruyó a la Asamblea sobre las medidas necesaria a aplicar en los casos de abusos. El P. Mancusi fue Procurador General de los Capuchinos y ha trabajado en la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica; goza pues de una gran experiencia, que ha desplegado al dirigirse a la Asamblea para abordar esta cuestión importante y delicada -su conferencia trataba los casos de abusos físicos, psicológicos y espirituales sobre menores y personas vulnerables-, explicando detalladamente los procedimientos previstos por el Derecho Canónico, modificado precisamente para ofrecer herramientas más eficaces para la resolución de estos casos y ha explicado también el modo concreto y práctico de afrontar estas cuestiones en el caso en que se presenten.

La jornada ha sido, pues, muy intensa, pero igualmente provechosa.