El año pasado, la Orden de los Carmelitas Descalzos celebró sus 100 años de presencia en Filipinas, que comenzaron con la llegada de religiosas Carmelitas francesas a Jaro, Iloilo, el 9 de noviembre de 1923. Este año, el arzobispo declaró un «Año especial de gracia» para el Monasterio de Cebú, a partir del 13 de mayo. La presencia de las Carmelitas en la arquidiócesis ha contribuido enormemente a fortalecer la fe de los católicos desde hace 75 años.
Asimismo, del 10 al 13 de mayo, se llevó a cabo en el Monasterio de Cebú un triduo de oración, reflexión y acción de gracias por las religiosas fundadoras que llegaron a Cebú el 13 de mayo de 1949, y por aquellas que han seguido sus pasos desde entonces.